Titulo original : Colomb Béchar, porte du ciel
Aunque el nombre de Colomb Béchar evoca imágenes de una ciudad bañada por el sol de las arenas, quien la visita por primera vez queda inmediatamente atrapado por el fresco hechizo de este oasis, cuyo contraste con el desierto cercano parece tan inmenso que renueva perpetuamente la idea de milagro. En diez años, la población de la ciudad se ha cuadruplicado gracias a la minería del carbón. En los alrededores de Colomb Béchar se halla también el «Centre Interarmées d’Engins Spéciaux», cuyo campo de investigación es ilimitado. Está dotado de amplios equipos de control remoto y observación por radar, que permiten dirigir y controlar los cohetes antes de su recuperación. Los cohetes despegan en un escenario lunar que recuerda a las novelas de ciencia ficción.